Verano, veranito

¡de vacaciones!

Bueno, bueno, bueno... ¡qué vivan las vacaciones!

Sólo leer y leer, horas... largas horas bajo el sol con un libro entre mis manos ¡eso es la gloria! Sin horarios ni obligaciones. Ver la televisión sin remordimientos, ver cosas estúpidas y reírme hasta el aburrimiento.

Disfrutar las tardes a veces sola, otras en compañía, conversar sin prisas de cosas que me interesan con la gente que me interesa. Hablar de sueños, pasiones, momentos, recuerdos, esperanzas... Ver fotos, bobear en el facebook o el hi5; comer a ritmo lento, disfrutando los condimentos, inventar nuevos platillos sin preocuparme por ensuciar mucho la cocina y los platos, no importa el tiempo que tarde ¡tengo tiempo! Mojarme cuando llueve, descubrir el arcoiris, caminar sin rumbo, andar en bicicleta.

Dejar pasar los días sin mirar el calendario, nadar... poder callar ¡callar, qué privilegio! sembrar, remover la tierra y regar las plantas, fumar menos, vestirme de fachas, dejar los tacones a un lado, no bañarme si no quiero (después de todo me "lavé" en la alberca ¿no? jajaja). Buscar mis hadas y quitarles el polvo, volver a charlar con ellas (sin hablar), mirar las estrellas, descubrir la luna llena... Convivir 24 horas al día con mi marido (que también esta de vacaciones), redescubrir a mi pareja, escucharlo (que hable él!); filosofar (barato), soñar,dormiiiiiiirrrrrrrrrrrrrrrrr.

¿Cuánto durará el letargo??? Sólo sé que la próxima semana me voy al mar, a juntar conchitas y perder la mirada intentando encontrar el infinito (también mi propio infinito), explorar, reacomodar emociones, reorganizar y proyectar... Hasta febrero, que el mundo ruede ¡¿qué más da?!

 

Lu*